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Ayuda a equilibrar el pH de la piel y a reducir el tamaño de los poros, dejando una sensación de frescura inmediata.
Por su poder calmante, alivia las rojeces y las irritaciones, especialmente en pieles sensibles o con tendencia a la rosácea.
Ayuda a hidratar la piel de manera ligera y natural, ideal para usar en cualquier momento del día como bruma facial refrescante.
Colabora en la revitalización y luminosidad de la piel, aportando un aspecto más saludable y radiante.
La inulina extraída de la raíz de la achicoria, una de las fuentes naturales con mayor concentración de este activo la cual le da el carácter prebiótico al mismo, mantienen equilibrada la flora microbiana de la piel, aumentan sus defensas, la nutre e hidrata.
Debido a su contenido de aminoácidos aportados por el hidrolizado del yogurt, también contribuye a la hidratación y la nutrición de la piel. Es un excelente hidratante que mejora la luminosidad y el aspecto de la piel.
Forma de uso: aplicá directo la bruma facial de rosas como tónico después de la limpieza. Úsala a lo largo del día como bruma refrescante para hidratar y revitalizar la piel. Podés aplicarla antes de meditar o durante un baño relajante, para una experiencia sensorial profunda.
Ayuda a equilibrar el pH de la piel y a reducir el tamaño de los poros, dejando una sensación de frescura inmediata.
Por su poder calmante, alivia las rojeces y las irritaciones, especialmente en pieles sensibles o con tendencia a la rosácea.
Ayuda a hidratar la piel de manera ligera y natural, ideal para usar en cualquier momento del día como bruma facial refrescante.
Colabora en la revitalización y luminosidad de la piel, aportando un aspecto más saludable y radiante.
La inulina extraída de la raíz de la achicoria, una de las fuentes naturales con mayor concentración de este activo la cual le da el carácter prebiótico al mismo, mantienen equilibrada la flora microbiana de la piel, aumentan sus defensas, la nutre e hidrata.
Debido a su contenido de aminoácidos aportados por el hidrolizado del yogurt, también contribuye a la hidratación y la nutrición de la piel. Es un excelente hidratante que mejora la luminosidad y el aspecto de la piel.
Forma de uso: aplicá directo la bruma facial de rosas como tónico después de la limpieza. Úsala a lo largo del día como bruma refrescante para hidratar y revitalizar la piel. Podés aplicarla antes de meditar o durante un baño relajante, para una experiencia sensorial profunda.